Javiera Acevedo desclasifica la compleja situación que vivió tras convertirse en madre
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En mayo del 2021 la vida de Javiera Acevedo cambió para siempre tras el nacimiento de su hijo Kai, fruto del la relación que tuvo con el ingeniero Federico Mekis, de quien habló durante su participación en el podcast Más que titulares que conduce Javiera Quiroga.
"(Lo) veo a él como un buen padre, porque es lo que yo quiero y es lo que mi hijo se merece. El camino no ha sido nada de fácil, pero todo lo que hemos hecho tiene a un niño feliz, que al final es eso, avanzar", partió diciendo la actriz.
Para luego sumar al respecto, "lo importante es Kai, el resto va a ir mutando, las relaciones personales van mejorando cuando uno piensa en el bien del otro, no en el de uno. No hay receta, solo amor por los niños", y destacando, "no me fijo en la desgracia, pero pienso que no podría haber sido mejor".
Declarando sobre el padre de su hijo, "Nuestra relación es bacán porque no hemos tenido que lidiar con nuestra relación de pareja. Kai tiene ese amor, nunca nos tiene que ver pelear, porque eso pasa cuando uno está en una relación que está remando".
Pero este no fue el único tema del cual profundizó en la entrevista Javiera Acevedo, sino que también de la compleja situación que enfrentó a nivel personal tras el nacimiento de su hijo. "Estuve como tres años en modo madre, es impactante, gorda, apagada, cayéndose el pelo, me sentía como enferma" dijo.
Haciendo hincapié sobre este tiempo, "Pero a la vez, muy lindo estar con él. No quería ir a ninguna parte, no me cabía la ropa, comía todo el día, dormía mal. Me invitaban a lugares familiares y escuchaba. Después cuando salía, me sentía mal, rara".
Lo que llevó a la entrevistadora a consultarle si tuvo depresión postparto. "Fui a la neuróloga y me dijo que tuve que haber tenido. No me daba cuenta, pensé que era una situación así normal, estaba mal genio, ofuscada, con rabia, no veía nada de las cosas positivas que veo hoy día", sinceró la actriz.
Precisando que por muchísimo tiempo, "“no tenía ganas de hacer ejercicios, estaba muy cansada. Desde el día en que quedé embarazada sentía un cansancio feroz, solo quería comer". Por suerte hoy eso es parte del pasado y está gozando a full la maternidad.